Chat con el.autor

https://connect.facebook.net/en_US/sdk/xfbml.customerchat.js

20/2/23

De como las rosas duran para siempre


Cuando el estaba por plasmar con mi pluma Bic

un puñado de renglones  con sabor a resignación,

apareció la niña que vende rosas.

Vende rosas

y nadie le compra, 

ni yo

no tengo, no quiero, no me alcanza

y son rosas

y eso, que hoy una amiga poeta

No una  rosa eternizada dentro de un acetato,

esta era una rosa natural, quizá demasiado,

vendiendo rosas artificiales

Las hay negras, amarillas y azules

y no, por ningún lado veo rosas rosas.

Una por una, 

a las parejas de transeúntes,

les engarza el símbolo del amor contemporáneo

y como si la rosa tuviera espinas

aceleran el paso, huyen.

Y es que las rosas tienen espinas,

no las que vende, 

esas son de madera,

quien las vende,

la pequeña niña flor,

esa rosa tiene espinas,

de esas, que lo lastiman a uno

espinas que se clavan en la conciencia

y en las cabezas agachadas.

N la rosita de cara sucia,

ella lleva la cabeza en alto,

orgullosa de su mente y de sus rosas de madera,

las cabezas que se agachan

son las que no pueden mirar de frente 

a una rosa real,

a una rosa que no hemos dejado florecer

porque solo en el país del mañana, se puede posponer el florecimiento de una flor

y se ensucia la cara tan limpia, a pesar de la mugre.

Es que hay manchas peores, como las que deja la indiferencia.

... y sus rosas no se marchitan y ella se marchita sin saberlo pidiendo a gritos “lleve, lleve su rosa”...

®2005, Andrés Castuera-Micher

De mi poemario inédito "En el exilio del exilio"

Adquiere cualquiera de mis libros publicados haciendo click aquí


No hay comentarios:

Publicar un comentario