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18/7/12

Partitura de las despedidas


Adiós en Sí Bemol
Si tan sólo 
me dieras una razón 
soy capaz de olvidarte, 
pero no me pidas 
que lo haga 
sólo con 1324 motivos 
¿donde se ha visto semejante insensatez? 


Resumiendo, no será cosa fácil eso de olvidarte.




Adiós en Fa Sostenido
Adiós, linda, pero tu amor ya no me cabe en la guantera del vocho..

Adiós en Mi
Te estoy tejiendo un par de alas, sé que te iras cuando las termine, pero no soporto verte sin volar....

Adiós en La Mayor
Hacer el amor son un verbo y un sustantivo... pero sin el verbo el sustantivo no sirve de nada.. ¿Me entiendes? Por eso tengo que irme.

Adiós en Re
Si fueras un poema, seguro serías de otro autor...

Adiós en Sol Menor
Desde que te fuiste, mi soledad se siente acompañada.

Adiós en Do
No te olvido porque no me acuerdo cómo hacerlo...

Adiós en La Bemol
Un café con dos de ti, por favor.

Adiós en Sí Menor
Eres mi más grande error no cometido.

Adiós en Do Mayor
No puedo creer que este parque sea tan necio como para seguir esperándote.

Adiós en Fa Mayor
En una de esas se me olvida quien eres y me vuelvo a enamorar de ti...

Adiós en La
Contigo y mis poemas, esos que odias porque nos son para ti yo quería envejecer.

Adiós en Sol Sostenido
¿Quién te metió en este cajón? Te dije que el polvo podía mancharte la sonrisa... Te dije todas esas cosas y tú, quisiste ser recuerdo...

Adiós en Re Mayor
Teme, te me estás olvidando...

Adiós en Sí Bemol
Si existieras, me escaparía contigo.


Adiós en Sol
Que conste... te quise hasta el último punto suspensivo del último poema...

®Andrés Castuera-Micher
Publicado en el libro "Del desamor y otras formas de morir"
2º Edición, Edición de Autor, 2012.

17/7/12

De cuando solía soñar





De cuando solía soñar 
me queda esa tarde 
en la estación del viejo tranvía, 
haciéndome viejo, 
sintiéndome tranvía 
pensando que vendrías...


De cuando solía soñar... 
me queda tu imagen
esperando bajo la lluvia 
con besos mojados, 
de dos extraños que solían encontrarse sin estarse buscando, 
me quedan esas locuras 
y las promesas 
que se rompieron antes de hacerse...
de cuando solía soñar... 
me queda...


De cuando solía soñar 
me queda tu vestido azul 
recargado en la pared 
cubriendo tu cuerpo 
recargado en mi imaginación 
en la que el vestido azul se quedaba hecho un idiota mirándonos... 
en medio de todos... 
amándonos por lo que nos quedara de instante... 
me queda... 
ese vestido azul... 
esa pared... 
tus manos... 
mis manos... 
y el silencio, 
aunque ganó, 
ese no cupo en el sueño.




De cuando solía soñar 
me quedan tus promesas escritas con agua de lluvia 
en tus ojos mojados con lluvia de recuerdos...


De cuando solía soñar 
me queda la certeza de que nunca pude tocarte....


De cuando solía soñar 
me quedan esos sueños que nacen muertos, 
en los que me quieres, por ejemplo.





®Andrés Castuera-Micher
Publicado en el libro "Del desamor y otras formas de morir"
2º Edición, Edición de Autor (México, 2012)


Ilustración:
® Roberto Carlos Andrade Jijena / "Damaura"
 Dibujo a lápiz carbón  21 x 30cm · 2006
http://www.bolivianet.com/arte/robertoandrade/

16/7/12

Mujer del Vestido Magenta




Hoy, un recuerdo me llamó por teléfono... 
automáticamente mi memoria le mandó al buzón de voz...
 eras vos... la voz de vos, inconfundible, penetrante... 
pero no dijiste nada... 
sólo que llamarías más tarde, tal vez, cuando me diera la gana volver a llorar...

Tus ojos son como los de una mujer que soñé y que no existe... 
y de la que me enamoré en el sueño aquel 
y tenías un vestido magenta.

Y de pronto, 
la mujer de aquel acróstico de adolescencia 
se sigue llamando igual 
y entonces sigue siendo poema, 
y entonces los recuerdos se llenan de tinta vieja, 
papel arrugado y verbos sin conjugar...


Mujer del vestido Magenta, 
hoy habría que tomar una pluma roja 
para tachonear la historia que no fue escrita por nosotros 
y con mayúsculas ponerle nombre a las cosas que nos prohiben...


¿Sabes, mujer del vestido magenta? 
Me gustaría que el cielo fuera del color de tu vestido, 
porque el azul hace tiempo que ya no me dice mucho
y por el contrario 
el magenta me provoca ganas de escribir.. 
y si no escribo me pongo azul


®Andrés Castuera-Micher
Publicado en el libro "Del desamor y otras formas de morir"
2º Edición, Edición de Autor (México, 2012)

11/7/12

Insomnios


I
Hoy te voy a querer de una manera más convencional, 
y no digo que te voy a amar, porque eso no va a suceder... así nomás, frente a todos y en las narices de tu orgullo, te voy a restregar algo tan sencillo que hasta tú puedas entender...

II
¿Y dónde estabas ayer que quería soñar contigo?

III
Nada peor para el insomnio que un sueño hecho realidad...

IV
El dolor es pasajero, tú eres el pase de abordar y nosotros, el camión vacío en donde viaja..

V
Compañera, lo nuestro es como el vino tinto, maduro, añejo, con buen cuerpo y aroma que perdura, 
por eso, hay que beberlo con calma, 
dejarlo en el paladar y no tragarlo como agua, 
ya no somos agua, 
pero espesos, viejos y reposados somos de lo mejor que hay entre los de nuestra cosecha...

VI
Cuando me doy cuenta de todo el tiempo que perdí 
contigo, me dan tantas ganas de perderlo otra vez y otra vez y otra vez, 
hasta que se me acabe contigo el que no usaste para ti...

VII
Tener sexo es tan ordinario que no tiene sentido hacerlo si la persona no es extraordinaria...

VIII
Lo malo de suicidarse es que hablarán más de tu muerte que de tu vida...

IX
Este poema empieza en tu adiós y termina en tu recuerdo...

X
Mis musas son del dominio público, asi que poco me importa ser un autor desconocido...




®Andrés Castuera-Micher
Publicado en el libro "Del desamor y otras formas de morir"
2º Edición, Edición de Autor (México, 2012)

Dibujo:
®Maria Peter. 2011 "Insomnio"




10/7/12

Renglones por Fulana de Tal


I
Fulana de tal, te espero donde siempre, para hacer lo que nunca... procura no tardar más de lo necesario, porque sólo tengo una vida que no se cuanto dure...

II
Fulana de tal si no crees en el amor ¿qué más te da entregarme un poco de tu ciencia ficción?

III
Hay nostalgias que no vale la pena arrancarse porque ni se van y solo arrancan la piel y la entraña...

IV
Fulana de Tal, hoy he descubierto que no eres tal...

V
Por favor vete y deja mis poemas como estaban...

VI
Avísame cuando estés por hacer una idiotez para estar cerca, con suerte, te enamoras de mi...

VII
Fulana de tal, por favor háblame del amor, mira que tengo muchos días de no reírme... hasta que no tengas más que decir, háblame del amor que estoy aburrido...

VIII
Fulana de tal: Ese exceso de cordura era innecesario. Mejor me hubieras dejado bajo la lluvia, tal y cómo me encontraste... loco, soñador, amante, intacto... Pero siempre hay un cuerdo dispuesto a cortarle al loco las alas que nunca tuvo...

IX
Respeto tu teoría de que no puedes hacer el amor con un desconocido, así que te propongo que tengamos sexo como animales en celo y nos olvidemos de definiciones convencionales e inventemos otras para tu diccionario.

X
Fulana de tal: Que ganas de tomar té, tomarte, té de lamento... té de seo.. cualquier té pero tomar té, besar té, sentir té... té de extrañar... té...


XI
La próxima vez que hagas una promesa, piensa que algún idiota, como yo, puede tomarla en serio...

XII
¿Amor? No gracias, sólo que venga en tabletas masticables.

XIII
Me rompiste las alas... pero lo que no sabes es que he aprendido a volar sin ellas.

XIV
¿Lo que quieres es que te escriba un poema? - le dije - entonces vete, lárgate, déjame y verás que entonces sí te voy a escribir - concluí.
... y que se va... que se larga... que me deja...
y ahora no puedo dejar de escribirle cada noche, aunque lejos de ser poesía lo que le escribo, sean, mas bien, todas las maneras posibles del idioma de decir regresa.

XV
Fulana de tal: ¿Por qué me sigo jugando la vida 
en cada poema que te escribo?
¿Por qué sigo extrañando ese beso único, entretejido en ayeres y sin fecha de caducidad?

XVI
¿A qué se debe que los parques no dejen de recordarme tus palabras?
¿Por qué hasta los árboles se acuerdan de las veces que dijiste no?
Sigues siendo aquel parque en el que dices que me quedé.
Yo camino, no sé hacer otra cosa.

XVII
Me dijo antes de irse: Tienes que vivir la vida , como si no supiera que por definición, la vida siempre se vive y por conjugación verbal obvia, siempre es uno el que la vive.

XVIII
El día que me perdone el haberte perdonado, entonces terminará la historia..

®Andrés Castuera-Micher
Publicado en el libro "Del desamor y otras formas de morir"
2º Edición, Edición de Autor, 2012.

9/7/12

La Mujer del Vestido Azul


Procura colgar tu vestido azul muy cerca de los recuerdos para que no pierda ese aroma a prohibido, para que las imágenes sigan empolvando la memoria, para que estorbe tus pasos cansados... y no te cambies el nombre cuando, desnuda, te pongas el azul color vestido en tu piel ansiosa...

 Mujer de vestido azul, hoy imaginé que estabas frente a mí, que las distancias nos las habíamos comido... que existes... que vamos a inventar la manera de escribir historias que ni en nuestros sueños nos hayan salido tan bien... tu vestido tan azul, tan tuyo tan perfecto, contorneando tu figura... tan azul como el vestido...

No dejes el vestido azul colgado en el armario, no importa que se haya manchado de noche, póntelo así, otra vez.. para contar la misma historia, esa que todos creen que sucedió... esa en que tu nombre lo puedo inventar, esa, la de...

O te pones el vestido azul o te pones tu desnudez, pero hazlo ya...

Mujer del vestido azul, hoy los recuerdos se tomaron la libertad de entrometerse entre mis sábanas y dejarme en la piel sabores melancolía-magenta que según yo, 
había enterrado en el parque en nuestra última vez,
pero ya sabes, no me hagas caso, 
siempre ando cargando lo que entierro 
y mis recuerdos te necesitan
al grado de desconocer tiempos, lugares y modales.

Mujer del vestido azul, tan sólo soy un poeta en celo.


Mujer del vestido azul, para conocerte tengo toda la vida, pero para hacerte el amor solo hasta las ocho, así que vamos quitándonos la ropa en lo que me platicas tu vida...

 Mujer del vestido azul, apenas imagino tu nombre y sin la certeza de cómo debo llamarte en mis poemas, 
me conformo con la certeza de esa sonrisa 
que detuvo al mundo durante  esos segundos 
en que no había nada en la plaza más que tú, la historia 
inexistente y yo... con lo que quedaba de recuerdo...

Mujer del vestido azul, la cama dice que si no vienes a hacer el amor conmigo, se va a dormir al sillón...

Que bien se ve ese vestido azul sin ti y tú sin él, recostados en la cama mirando como les miro sin pudor...

Mujer del vestido azul, que tu única promesa sea no prometer nada.... 

...y que le digo a la Mujer del Vestido Azul  que si puedo leerle un poema 
y que me dice que sí  
y entonces, 
comencé a platicarle la historia que tuve que vivir sin ella...

Solo sé que su vestido era azul, pero pudo cambiar mi mundo, mis sueños y corregir mis poemas con una sonrisa y su nombre es irrelevante con un vestido tan azul 
y tan vestido...


®Andrés Castuera-Micher
Publicado en el libro "Del desamor y otras formas de morir"
2º Edición, Edición de Autor (México, 2012)

Ilustración:
®Patricia Bacchi
"La mujer del vestido Azul"
Óleo 60 x 80

6/7/12

La Musa Desnuda



El poeta saca la pluma del bolsillo
La musa saca un par 
de senos morenos 
que se rebelan a la opresión 
del sostén negro semi transparente

El poeta busca donde sentarse
La musa ha ocupado 
todos los asientos disponibles 
con su ropa aventada al azar 
con una cuidadosa estrategia

El poeta abre el cuaderno
La musa abre las piernas y le enseña 
una inspiración húmeda 
color malva y de un ardiente 
interior magenta


El poeta escribe una metáfora de 
las piernas de la musa


La musa desnuda le quita la pluma 
y se escribe en el seno izquierdo 
una frase explícita, simple, atrevida 
y con un verbo imperativo 
que urge conjugar

El poeta le pide la pluma


La musa desnuda la coloca 
en su mojado sexo 
y le indica el lugar exacto 
para que le hagan poesía


El poeta toma su pluma 
y toca el sexo de la musa desnuda 
y se le olvidan los versos



La musa desnuda ríe 
y le besa las manos 
y con las manos besadas del poeta 
recorre sus muslos ansiosos
sus nalgas sepia 
y remata el momento táctil 
con una melodía 
con las notas-pezones de musa 
y  acordes-dedos 
de poeta.


El poeta 
se ha olvidado del cuaderno 
y usa la tinta de su saliva 
para escribir con la lengua 
en todos los lugares de la 
musa desnuda 
en donde cabe 
la lengua del poeta...

La musa desnuda 
ha sometido al poeta 
y le ha tirado los versos 
a punta de orgasmos 


El poeta quiere 
memorizarla completa, 
saber su nombre 
y enamorarse de ella...


La musa desnuda 
sólo quiere venirse 
encima de los poemas 
firmar su cuerpo 
con la tinta blanca 
del pequeño poeta 
que ha sucumbido 
ante el vaivén de las caderas  
la fuerza de los muslos
el sudor de los senos
la perfección de la espalda 
y la calentura de los labios (unos)
y el sudor de los labios (los otros)

El poeta ha dejado 
de escribir poemas 
y las palabras le importan 
cada día menos...


La musa desnuda sigue posando 
para él 
en ese retrato 
en blanco y negro color sepia....


                                          ®Andrés Castuera-Micher
                                      Este poema forma parte de mi libro "Renglones del Cajón"
2016

Foto:  ®Eric Márvaz
Modelo: Johanna